Llega la estación más esperada del año, el verano y con él, unos huéspedes que nunca son bienvenidos en nuestra casa, ¿sabéis de quién hablamos? Las temidas picaduras de mosquitos.

Sin embargo, en función del índice de lluvias de primavera, las altas temperaturas u otros factores, podemos ver este insecto con más o menos frecuencia.

En el hábitat que se sienten más cómodos es en entornos cálidos y húmedos.

Las zonas de España más expuestas a las poblaciones de mosquitos son, principalmente la zona del Delta del Ebro y las marismas del Guadalquivir, concretamente, los pueblos de Sevilla. Entre los que hay que recalcar Isla Mayor y la Puebla del Río, en los que existen grandes terrenos de arrozales y sufren la invasión de los mosquitos con la llegada de las altas temperaturas.

Causa de la aparición de los mosquitos en verano

Los mosquitos son muy sensibles a su entorno, por lo que cambios en las temperaturas y las lluvias pueden afectar al marco ambiental de estos.

Es cierto que en la época estival el número de mosquitos que podemos ver a nuestro alrededor se multiplica, esto es debido a numerosas causas que se dan normalmente en esta época del año.

Las lluvias en primavera

Las lluvias aumentan durante la temporada de primavera, lo que favorece a crear el hábitat perfecto de los mosquitos, ya que habitualmente, la hembra de este tipo de insecto ponen sus huevos en aguas estancadas, por ejemplo, donde no existen corrientes y es más complicado que haya depredadores.
Los mosquitos crecen en áreas de alta humedad y precipitaciones, en las que las gotas de lluvia pueden llegar a pesar 50 veces el peso de estos voladores, sin embargo, la solidez de estos insectos frente a la lluvia es muy impresionante, ya que el robusto exoesqueleto del mosquito y su débil masa lo convierten en impermeable ante las gotas de lluvia.

Altas temperaturas

Los mosquitos son animales de sangre fría, esto quiere decir que su temperatura corporal se asimila a la temperatura de las ciudades en la estación de verano, y se sienten cómodos cuando las temperaturas aumentan, de este modo, el calor es para ellos un aliado para reproducirse.
Esto significa que las altas temperaturas o los entornos húmedos fomentan el ciclo reproductivo de las larvas, para que las crías de estos insectos nazcan y crezcan es necesario que se alcancen unas temperaturas de entre 7 y 16 ºC.

Calentamiento global

Los mosquitos son animales de sangre fría, esto quiere decir que su temperatura corporal se asimila a la temperatura de las ciudades en la estación de verano, y se sienten cómodos cuando las temperaturas aumentan, de este modo, el calor es para ellos un aliado para reproducirse.
Esto significa que las altas temperaturas o los entornos húmedos fomentan el ciclo reproductivo de las larvas, para que las crías de estos insectos nazcan y crezcan es necesario que se alcancen unas temperaturas de entre 7 y 16 ºC.

Cómo evitar la picadura de los mosquitos en verano

A continuación te planteamos algunos tics que puedes tener en cuenta este verano para evitar las picaduras

• Utilizar camisetas antimosquitos , a ser posible de mangas largas, para no tener la piel expuesta.
•  No utilices perfumes con olor a frutas, ni muy intensos.
• Lleva a cabo unos buenos hábitos de higiene, ya que el sudor y los olores fuertes pueden atraer a los mosquitos.
• No exponernos al sol durante las horas del día de más calor, normalmente tras el mediodía, Se estima que la temperatura más alta del día en verano se registra entre 3 y 4 horas.
• Aplicar una red de mosquiteras en aquellos espacios de fácil acceso para ellos, especialmente puertas y ventanas.
• Emplear un repelente de mosquitos para prevenir, importante que no produzcan ningún tipo de alergias.

Aun así, siempre vamos a recomendar el servicio de un profesional especializado en control de plagas, que ofrece servicios de desinfección para la eliminación de cualquier tipo de insecto.
Por razón, si tienes algún problema relacionado con plagas, te aconsejamos que contactes con nosotros, pues en Pescont3 nos apoyamos en un sistema único basado en la identificación de las especies que causan las plagas para ofrecer las soluciones más adaptadas a cada una y más eficaces.